Celulares abren caminos en Cuba
By JUAN CARLOS CHAVEZ
jcchavez@elnuevoherald.com
Con el dinero de la venta de un celular desechado en Miami, miles de cubanos en la isla logran ponerse en línea.
El programa Celulares para Cuba, de la organización Raíces de Esperanza, ha conseguido llevar más de 1,500 aparatos que han contribuido a la expansión de la telefonía inalámbrica en un país donde la posesión de un teléfono es un preciado privilegio.
``Tenemos mucha fe en el poder de la comunicación descentralizada'', dijo Felice Gorordo, cofundador de la organización. ``No queremos dominar, simplemente estamos tratando de promover mejores formas de comunicación entre los cubanos''.
Con el producto de la venta por $1 de cada celular de uso a la empresa Ecophones (Recycling Fundraiser), se compran otros nuevos que llegan a la isla por diferentes vías, desde turistas y exiliados que visitan a sus familiares hasta activistas de organizaciones humanitarias.
``Obviamente no damos los nombres de quienes reciben los teléfonos ni decimos cómo llegaron, pero lo hacemos de una forma muy transparente'', puntualizó Gorordo. ``El gobierno de Estados Unidos nos deja enviar estos celulares y, al mismo tiempo, Cuba ha dicho que ahora es legal que un cubano pueda conectarse a un móvil. Estamos funcionando bajos las leyes''.
Raíces de Esperanza, integrado en su mayoría por universitarios y profesionales cubanoamericanos comprometidos con una política de cambios en la isla, puso en marcha el programa en septiembre. Ecophones, de Texas, se dedica al reciclaje de teléfonos y otros aparatos electrónicos.
Los celulares de uso se recolectan en pequeñas cajas de cartón que los activistas colocan en universidades, colleges, supermercados y ferias como CubaNostalgia, que se celebra este fin de semana en Miami en Tamiami Park, Coral Way y 112 Ave. del suroeste.
Valentín Fernández, de 19 años, estudiante de Leyes en la Universidad de Harvard, estaba el viernes en CubaNostalgia en el quiosco del blog Babalú, que se ha solidarizado con la iniciativa.
Desde allí, Fernández exhortaba a los visitantes para que donaran sus celulares.
``Respetamos lo que hacen nuestros abuelos y padres porque siempre han estado involucrados en el tema cubano, pero nosotros también queremos involucrarnos a un nivel no-político y con una base humanitaria para ayudar a nuestros hermanos y hermanas cubanas'', comentó.
Las autoridades cubanas autorizaron en el 2008 que sus ciudadanos pudieran activar líneas de telefonía celular, un lujo hasta entonces reservado a empresas y ciudadanos extranjeros mediante la modalidad de prepago en CUC, un peso cubanos convertibles equivalente a $1.20.
Sin embargo, la posesión de un celular es difícil en un país cuyo salario promedio es de 414 pesos mensuales (unos $17). Los usuarios pagan un promedio de $43 por la activación del servicio. Además, de los 169 municipios de la isla, 23 no tienen aún cobertura de telefonía móvil, algunos de ellos por estar ubicados en zonas montañosas y cenagosas.
A pesar de las dificultades, según la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA), para fines de año habrá más de un millón de usuarios de celulares.
Los miembros de Raíces de Esperanza intentan contribuir al contacto de de población de la isla, sobre todo los jóvenes.
``Es una idea que está tomando cada día más forma y estamos orgullosos de ir hacia adelante'', dijo Miguel Cruz, responsable del proyecto y estudiante de Ingeniería Aeronáutica de la Universidad de Texas.
Cruz precisó que no hay ningún fin político detrás de la iniciativa al tiempo que saludó la respuesta y apoyo de los estudiantes y profesionales cubanos que se han sumado.
Entre éstos se cuenta Valentín Prieto, director del blog Babalú, quien comentó que se trata de una estrategia importante en momentos en que la isla sufre por la falta de diseminación de información.
``El celular es una forma de mantenerlos conectados'', observó Prieto. ``Mientras más celulares haya en Cuba, más información se pueden pasar entre ellos, y más sabrán de lo que pasa en su propia isla''.