La complicada vida de Tony Tormenta
Alberto Nájar
BBC Mundo, México
Cuando era adolescente, Ezequiel Cárdenas Guillén y su hermano Osiel se ganaban la vida lavando autos y camionetas de la desaparecida Policía Judicial Federal en su natal Matamoros, Tamaulipas, en el noreste de México.
Ese primer contacto con el mundo policíaco del país marcó la vida de los hermanos, quienes años después se convirtieron en líderes del Cartel del Golfo, una de las organizaciones de narcotráfico más importantes del país.Ezequiel, a quien llamaban Tony Tormenta por su carácter violento, murió durante un enfrentamiento con infantes de marina, una batalla de más de ocho horas que paralizó a la ciudad fronteriza con Estados Unidos.
Las autoridades mexicanas dicen que la muerte del capo, por quien el gobierno estadounidense ofrecía una recompensa de US$5 millones por su captura, es un paso importante en la lucha contra carteles de la droga.
Pero analistas como Alberto Islas, director en México de la firma consultora en seguridad Risk Evaluation, advierten que el poder de la organización no sufre cambios.
"El que sale fortalecido es Eduardo Costilla, El Coss, porque termina con viejas rencillas y reunifica el mando a su alrededor", dice en conversación con BBC Mundo.
El Coss fue detective en Tamaulipas, donde conoció a los hermanos Cárdenas Guillén. Es quien mantiene el control real de la organización, según autoridades mexicanas.
Pleitos y alianzas
La vida de Tony Tormenta no se entiende sin su hermano Osiel, uno de los líderes más violentos del Cartel del Golfo y quien según la Procuraduría (fiscalía) General de la República (PGR) tenía mucha facilidad para ganarse la voluntad de policías y militares.
Una muestra es que creó la banda de Los Zetas, formada al principio por 40 soldados mexicanos de élite –algunos entrenados por el Ejército de Estados Unidos- , que desde 1998 se convirtió en el brazo armado de la organización.
A Osiel le decían El Mata Amigos porque ganó el poder en la organización tras ordenar el asesinato de sus aliados.
Bajo su mando el Cartel del Golfo extendió su influencia por todo el sureste de México, y estableció bases en Michoacán, al oeste del país.
El que sale fortalecido es Eduardo Costilla, El Coss, porque termina con viejas rencillas y reunifica el mando a su alrededor
Alberto Islas, Risk Evaluation
El Mata Amigos fue detenido en 2003. Su captura desató una lucha interna por el control del Cartel, que finalmente se dividió en dos facciones a partir de enero de 2010.
Por un lado quedaron El Coss y Tony Tormenta; por el otro, la banda de Los Zetas con Heriberto Lazcano, El Lazca, al frente.
Ambos grupos han entablado alianzas con otros carteles.
El señor de los contactos
Según la agencia antidrogas de Estados Unidos, la DEA, Ezequiel Cárdenas era el jefe de plaza de Matamoros, una forma de decir que controlaba la delincuencia y el tráfico de drogas en esa ciudad.
En los hechos compartía el poder con El Coss, después que ambos rompieron la alianza con Los Zetas en enero de 2010.
Algunos analistas han dicho que Ezequiel Cárdenas mantenía su jerarquía en la organización porque conocía los contactos en Colombia para la compra de cocaína, algo que otros líderes no tenían.
No es todo. Al igual que su hermano Osiel, Tony Tormenta se relacionaba fácilmente con policías y autoridades locales, que según la PGR le brindaban protección.
Un escudo que explica el intenso enfrentamiento armado antes de su muerte, y que provocó incluso el cierre de tres de los cuatro puentes internacionales que hay en Matamoros.
El control de la información de Ezequiel Cárdenas, y el rompimiento de la vieja alianza, es una de las razones que explican la violencia de Los Zetas, quienes para financiarse debieron recurrir a otras actividades como secuestro, extorsión y tráfico de indocumentados, de acuerdo con datos del Ministerio de Seguridad Pública.
También abrieron –de forma violenta- sus propias rutas de tráfico en Centroamérica, donde incluso amenazaron al presidente de Guatemala, Alvaro Colom.
Además, la Policía Internacional investiga nexos de este grupo con la ´Ndrangheta italiana.
El Cartel del Golfo, hoy
Osiel Cárdenas Guillén fue sentenciado a 25 años de prisión en una cárcel de Estados Unidos, y al cumplir la condena ingresará al programa de testigos protegidos de Estados Unidos, según datos de la Corte de ese país.
Es un acuerdo que consiguió después de ofrecer datos sobre el narcotráfico en México a las autoridades estadounidenses.
Eduardo Costilla, El Coss, puede controlar sin problemas el Cartel del Golfo que. lejos de resquebrajarse podría entrar a una nueva etapa de fortaleza, dice el analista Islas.
Y la familia de Ezequiel Cárdenas Guillén seguirá en Estados Unidos, donde tienen su residencia desde hace varios años.