20 de febrero
ATLANTA (AP) - Más de la mitad de los estados de Estados Unidos no han utilizado un fondo de 5.000 millones de dólares de estímulos federales destinados a crear empleos para personas que requieren de asistencia social.
Los líderes en la mayoría de los estados se han resistido a comenzar a aportar los fondos complementarios por el mismo valor que requiere el programa para crear los empleos, que podrían desaparecer después de que expire el subsidio federal el 30 de septiembre.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos ha entregado1.200 millones de dólares en efectivo de emergencia para los programas generales de asistencia social. Esto incluye 124 millones para 21 estados y el Distrito de Colombia con el fin de aligerarles la carga al pagar a los patrones para que contraten a trabajadores poco calificados y con sueldos bajos.
No todos los estados se han limitado, algunos como California, Tenesí y Georgia _ donde el desempleo se ha disparado entre los receptores de la Asistencia Temporal para Familias Necesitadas (TANF por sus siglas en inglés)_ han comenzado a aprovechar el fondo para subsidiar la creación de miles de empleos, que según sus autoridades ayudan a evitar que los trabajadores se hundan más en la pobreza.
El atractivo a corto plazo está claro, al menos para aquellos que reciben apoyos. En Georgia, por ejemplo, una madre desempleada con dos hijos, que recibe 270 dólares al mes en TANF podría ganar tres veces más con un empleo de salario mínimo subsidiado.
Pero los críticos sostienen que los estados se pueden ver afectados a largo plazo pues se impulsa a los patrones a crear trabajos baratos y desechables más que un crecimiento laboral a largo plazo.
Los estados deberían "ofrecer incentivos para que las empresas contraten a personas más calificadas pues hay más posibilidades de que sean conservadas una vez que se terminan los incentivos", dijo Don Sabbarese, director del Centro Econométrico en la Universidad Estatal Kennesaw en Georgia.
Los fondos federales hacen poco para ayudar a que la gente deje de recibir asistencia social de forma permanente y retira el dinero que podría ser empleado para crear mejoras económicas a largo plazo, agregó Sabbarese.
"Si esos empleos no se encuentran en áreas de demanda y crecimiento sostenible no nos llevarán a habilidades suficientes y atractivas para el mercado", dijo Sabbarese. "Y el dinero que se emplee en esos programas sólo se desperdiciará".
El fondo de emergencia creado por la Ley de Recuperación y Reinversión Estadounidense de 2009 está diseñado para ayudar a los estados que enfrentan un aumento en los costos de TANF pues más familias requieren el programa de ayuda de fondos federales operado por el estado.
Los estados pueden usar el dinero para dar asistencia financiera básica a las familias así como para pagar a los patrones para que creen empleos de nivel bajo con beneficiarios de TANF que no tienen trabajo o con personas poco calificadas que de no recibir la ayuda se sumarían al programa de asistencia social.
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