LYNN, MA. Una organización comunitaria de aquí denunció los abusos que asegura se comete contra los empleados hispanos del supermercado Price Rite que se encuentra en la Lynnway, de esta ciudad.
Jornada Latina dice que en el mencionado establecimiento, localizado en el 395 de Lynnway, lo peor que se hace con los empleados latinos que trabajan en las cajas, es prohibirles hablar español con los clientes, aunque éstos no hablen inglés.
Dice la organización en su denuncia, que la situación fue comprobada por miembros de esa entidad que presenciaron a una supervisora advertir con un tono grosero a una empleada con la que hablaban “y cuando se le preguntó el por qué de la advertencia, dijo que no podían hablar español con los clientes”.
La actitud de los ejecutivos de la empresa se mantiene a pesar de que un alto porcentaje de la clientela es de origen latino, muchos de los cuales podrían no hablar inglés o se sienten más cómodos haciéndolo en español.
“Nos tratan como muchachos, como si fuéramos anormales, llamándonos la atención por cualquier tontería”, expresó una empleada que pidió reserva de su nombre.
Indicó que eso ocurre a pesar de que a ellos precisamente se les ofreció el trabajo por ser bilingües, pero resulta que ahora no pueden hablar español si no es bajo supervisión de un ejecutivo.
“Cuando un cliente no habla inglés, tenemos que llamar a una supervisora para que nos autorice y estar presente, pese a que ninguna de ellas habla español”, dijo la informante a Jornada Latina.
¿Cómo es posible prohibir hablar español en la sociedad norteamericana actual sin entrar en una contradicción flagrante, sin lesionar los derechos humanos de millones de ciudadanos, sin provocar una fractura social? se preguntó la institución a modo de crítica a la política excluyente de los ejecutivos de Price Rite. A su juicio es contradictoria y prejuiciosa esa política de los ejecutivos de Price Rite, tomando en cuenta que en estos tiempos hasta la Casa Blanca, sede del Gobierno Federal, emite sus declaraciones en inglés y español.
Indicó Jornada Latina que se siente en el deber de alzar la voz, “apoyando a nuestros hermanos latinoamericanos en Estados Unidos, al igual que defenderemos nuestro patrimonio, nuestra cultura y nuestro idioma”.
“Somos 20 países latinos donde nos une un idioma, nos unen nuestras tradiciones similares y nuestros antepasados”, señaló, al tiempo que llamó a la comunidad hispana de Lynn para que demande de la empresa cambiar de política, so pena de llamar a los hispanos a boicotear las compras en el establecimiento.
Recordó que “ninguna ley prohíbe hablar español en Estados Unidos y hacerlo es incurrir en una flagrante violación a la libertad de expresión, además de que evidencia a quien lo hace como un racista, con un racismo que se deriva de una ignorancia rampante”.
Jornada Latina pidió a los hispanos de Lynn que si no pueden hacer su protesta en la cara de los ejecutivos en el mismo establecimiento Price Rite de la Lynnway, que lo hagan llamando al teléfono 781- 581-2611, no importa que sea en inglés como en español.
“Los hispanos somos el 38 por ciento de la población de Lynn y eso tenemos que defenderlo y hacernos sentir ante cualquier desaprensivo que pretenda desconocer esa realidad”, terminó diciendo la nota de Jornada Latina.
Una supervisora de Price Rite, en Lynn, que se negó a identificarse, dijo a Siglo21 que ella no podía hacer comentario sobre esa denuncia y que el manager general de la tienda, que tampoco identificó, no se encontraba.“No sé por qué hacen esa denuncia”, fue lo único que comentó la empleada cuando se le hizo referencia a las declaraciones de Jornada Latina.
Por Roberto Rodríguez/Velveth Veliz
siglo21.com