BOSTON, MA. El escándalo que se ha suscitado en torno al Comisionado de Libertad Condicional del Estado, John J. O’Brien, ha motivado la suspensión del funcionario y se designó una comisión especial para llevar a cabo una “pronta y exhaustiva” investigación del organismo oficial.

La decisión es el resultado del pronunciamiento que habían hecho el Gobernador Deval Patrick y su rival republicano, Charles D. Baker, a favor de una amplia reforma en el Departamento de Libertad Condicional del Massachusetts, y demandaron de la oficina del Fiscal General del Estado el inicio de una investigación sobre el funcionamiento de ese organismo y la pobre supervisión financiera de la dependencia.

Baker dijo que O’Brien debe ser despedidos y pidió a la Fiscal General Coakley establecer si existe alguna conexión entre las donaciones políticas y las decisiones que involucran contrataciones y promoción en el Departamento de Libertad Condicional.

“Ya es suficiente”, manifestó Baker. “Esto tiene que terminar”, en tanto el Gobernador Patrick también pidió una revisión independiente de parte de Coakley después que el periódico The Boston Globe hizo público un informe detallado sobre la administración de O’Brien en el Departamento de Libertad Condicional.

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